
El gobierno del estado de Puebla analiza la adquisición del 75 por ciento de las acciones de Concesiones Integrales S.A. de C.V., empresa que opera bajo el nombre comercial de Agua de Puebla, con el objetivo de impedir que el control del servicio de agua potable quede en manos de la trasnacional filipina Manila Water.
El consejero jurídico del estado, Raúl Pineda Zepeda, aclaró que, pese a los rumores sobre una posible transacción entre los actuales accionistas y la empresa extranjera, hasta ahora no existe ningún documento formal ni autorización oficial que valide un cambio en la propiedad de la concesionaria.
En entrevista, este lunes por la mañana, el funcionario explicó que la eventual compra forma parte de un análisis integral que realiza la administración estatal, en el que se ponderan aspectos legales, financieros y administrativos.
“Se trata de un análisis de escenarios. No existe ningún acto formal que implique una transacción o una modificación al título de concesión”, subrayó.
Pineda Zepeda indicó que el gobierno estatal ha identificado irregularidades de fondo en el otorgamiento original de la concesión, al considerar que los acuerdos firmados resultan desventajosos para el estado.
Asimismo, advirtió que la actual administración no será omisa frente a los incumplimientos en la prestación del servicio ni en materia de infraestructura, y confirmó que se mantiene en revisión el título de concesión de servicios de al menos seis empresas.
